Lo "bueno" de no tener ideología (o al menos de intentarlo, porque está muy mal visto) es que las noticias no le entran a una como lo hacen aquellos pobres polluelos en la máquina que los tritura para devenir hamburguesas low cost. Quiero decir que una ya se mira TODAS las noticias, vengan de donde vengan, con mucho repelús y bastante distancia, intentando no mancharme y sobre todo, y lo más difícil, no perder la ingenuidad ni creerme en la aburrida Razón Absoluta.
Pero, en resumen, lo que leo es que los partidarios de unos elaboran tendenciosos titulares a favor de unos y en contra de otros, y hasta retocan fotos o cualquier salvajada. Dependiendo del buen gusto de quien redacte y ponga las fotos, la cosa puede acabar en chiste. Y yo no puedo evitar preguntarme cómo se organiza semejante espectáculo. Porque no concibo que la ideología, o el sistema de ideas individual, domine el criterio cuando se decide redactar un artículo informativo y lanzar al espacio sideral TITULARES de posts a los que nadie entra, o tanto da, artículos en papel que acaba en la basura, y ya que estamos, de debates en tele, o en radio, que mañana se olvidan, pero quedan, durante un tiempo, como Grandes Verdades retratadas en las pantallas y son los memes de última generación.
Dirigir la opinión desde un medio de información (o Guerra Mediática) es una práctica muy clásica, documentada, de combates políticos, a lo Juego de Tronos, hoy con Internet. Y las tretas políticas, según la creencia popular, en principio, aunque todo el mundo sabe que se traman por muchos otros motivos, son también guerras ideológicas.
Dirigir la opinión desde un medio de información (o Guerra Mediática) es una práctica muy clásica, documentada, de combates políticos, a lo Juego de Tronos, hoy con Internet. Y las tretas políticas, según la creencia popular, en principio, aunque todo el mundo sabe que se traman por muchos otros motivos, son también guerras ideológicas.
La Ideología, o sistema de ideas individual, se reparte, según la común construcción social, en dos bloques (como todo en el Universo, al menos en Star Wars) o polaridades: Izquierda-Derecha. Pero después resulta que esas dos grandes palabras no significan más que bastas corrientes de pensamiento que contienen razonamientos sobre cuestiones morales (o religiosas) e intereses económicos. Y que tanto la Moral como la Economía carecen, en sí mismas, de ideologías. Ya que una se basa en reglas establecidas por supervivencia en el territorio (no son ideas, son costumbres) y la otra actúa por su cuenta, fuera de leyes y éticas humanas, diseñando con su crecimiento todo un entramado para mí imposible de abarcar (por desconocimiento), de la que todas las personas formamos parte de alguna manera, ya que todos somos mano de obra y consumidores potenciales. Y al final, lo que queda de la Ideología, no es más que un puñado de paparruchas moralistas y puntos de vista relativos o interesados. Mitologías!!... Mitología capitalista!!...Mitología obrera!!..el fútbol, la patria, el culto a la familia, las leyes sobre los cuerpos, todo se basa en Mitología, como lo hace el glamour de Hollywood o la prensa rosa. Es sorprendente que algo así defina nuestras decisiones.
La ideología es un sistema de valores, perdóneme, hasta frívolos. Actúa como rayo dogmático, aparentemente sitio seguro, en realidad una cárcel de verdades que encierran a la imaginación. Y la imaginación, ese don trascendental, es lo único que puede suplir a la ignorancia, o al menos, engañarla. La ideología, una maraña de parches que se adhieren a la mente, un machambrado sostenido levemente por likes y corazoncitos, o por una charla en el bar (o peor aún, bajo las directrices de un partido), pone límites a muchas de nuestra capacidades, empezando por la empatía y acabando por el derecho al uso del propio criterio, así como para, precisamente, imaginar. O sigui, prever, especular, visualizar las infinitas posibilidades y soluciones que desde luego, existen, de la misma manera que existen las cosas más espeluznantes, y de la misma manera, pueden ponerse en práctica. La ideología nos distrae de lo importante, del núcleo, porque conforma y no pone en duda. Y es poco probable que sirva de nada. Ya que lo único útil es lo que se realiza.
Pero en fin yo quería hablar sobre las noticias, y no filosofar póbremente. Lo que quería decir es que:
Pero en fin yo quería hablar sobre las noticias, y no filosofar póbremente. Lo que quería decir es que:
Si LEE EL ARTÍCULO, o sea, prescinde del titular redactado a pachas entre la ideología y el posicionamiento en Google, se encontrará con los DATOS. Que son, normalmente, lo más parecido a la verdad que suele haber en un artículo. USE IT. ¿Que para qué? Para seguir pensando, of course.
